Un arma anti-drones es un sistema anti-drones ligero y portátil diseñado para neutralizar drones no autorizados y amenazantes. A diferencia de los sistemas anti-drones fijos más grandes que se instalan en un solo lugar, este sistema es fácil de transportar y está diseñado para una respuesta rápida en situaciones como eventos públicos, seguridad de emergencia en fronteras y protección de instalaciones vitales, que requieren actuación inmediata. Dichos sistemas pueden utilizarse en fronteras, instalaciones cruciales y situaciones de emergencia nacional.
Un arma anti-drones funciona para deshabilitar las rutinas normales de operación de un dron y está diseñada para terminar el vuelo, la vigilancia y las operaciones del dron. Para que el arma anti-drones funcione, es necesario interrumpir los enlaces de comunicación operativos y funcionales entre el dron y su sistema de control. Estos enlaces comunican y controlan al dron. Un dron operativo sin enlace tiene sus sistemas de control comprometidos, incluso si es temporalmente; dichos sistemas se cruzan para lograr un dron operativo interrumpido.
Para comprender cómo funciona un arma anti-drones, se debe considerar su capacidad de interrumpir los enlaces de comunicación de un dron. La mayoría de los drones operan mediante un sistema de comunicación bidireccional basado en frecuencia de radio. Los controladores terrestres utilizan estas señales para enviar comandos como despegue, aterrizaje y dirección de trayectoria. El dron también puede proporcionar información en tiempo real, como imágenes de video, a sus controladores.
Un arma anti-drones funciona emitiendo señales de radiofrecuencia de alta potencia que coinciden con el rango de frecuencia de los enlaces de comunicación del dron. Esto crea una interferencia tan fuerte que las órdenes del operador del dron se vuelven incomprensibles. Sin una comunicación receptiva con los controladores en tierra, el dron queda fuera de control. Algunos drones se detienen y permanecen flotando en su lugar. Otros regresan al punto de despegue y aterrizan lentamente debido a una función de seguridad establecida por el fabricante. Esta interferencia es altamente precisa, afectando únicamente al sistema de comunicación e ignorando todos los demás dispositivos electrónicos circundantes.
Una parte importante del funcionamiento de un arma anti-dron es su capacidad para interrumpir el sistema de navegación del dron. La mayoría de los drones comerciales y de consumo dependen de sistemas como GPS y GLONASS para determinar su posición, altitud y trayectoria de vuelo. Los drones necesitan señales de navegación constantes para mantener trayectorias de vuelo precisas y evitar perderse.
Las armas anti-drones pueden emitir señales de interferencia que bloquean la recepción de señales GPS por parte de los drones. Una vez que los drones comienzan a perder las señales GPS, rápidamente se desorientan. Por ejemplo, un dron en una misión de vigilancia puede perder repentinamente la señal GPS, lo que hace imposible completar su misión. A veces, los drones pierden las señales de navegación y activan sus sistemas de seguridad, aterrizando para evitar un accidente fuera de control. Interferir simultáneamente con los sistemas de comunicación y navegación de un dron garantiza que un arma anti-dron pueda inutilizarlo en la mayoría de las situaciones.
Una de las partes esenciales para comprender cómo funciona un arma anti-drones consiste en entender su proceso de ejecución. Este proceso es lo suficientemente sencillo como para ser realizado por un solo operador con mínima formación. El operador primero detecta la presencia no autorizada del dron utilizando un dispositivo de detección de drones (algunas armas anti-drones tienen funciones de detección). Este primer paso ayuda a determinar la posición del dron, su dirección de vuelo y la banda de frecuencia.
Una vez que esto se establece, el operador enfoca la pistola anti-dron hacia el objetivo dron; muchos modelos de estas armas cuentan con una mira o tecnología láser de ayuda para apuntar con precisión. A continuación, el operador activa la función de interferencia de la pistola anti-dron. El dispositivo inicia el proceso de emisión de señales de interferencia hacia el dron. El operador mantiene el apuntado hacia el dron durante un período de tiempo (normalmente unos pocos segundos hasta decenas de segundos), con el fin de garantizar que las señales de interferencia surtan pleno efecto. Finalmente, el operador observa la respuesta del dron y verifica si este se mantiene en suspensión, regresa o aterriza, lo que confirma que ha sido desactivado. Este proceso detallado explica cómo una pistola anti-dron responde rápidamente a las amenazas de drones.
Cada mecanismo tiene ciertas fortalezas y debilidades; las armas anti-drones no son una excepción. Uno de los puntos más fuertes es la portabilidad del sistema de armas y su tiempo de reacción rápido. Es posible utilizar el arma anti-dron en cuestión de minutos después del despliegue. Dado que el sistema no requiere procedimientos complicados de configuración, un personal capacitado puede activarse para hacer frente inmediatamente a una amenaza de dron intruso. Esta es una gran ventaja en comparación con los sistemas anti-drones más estacionarios.
La seguridad del método es otro punto fuerte. Dado que el arma anti-dron no interviene en la neutralización física de una amenaza, los usuarios no están expuestos al peligro de derribar un dron y provocar que escombros físicos incontrolados caigan al suelo, lastimando personas o dañando propiedades. Sin embargo, una ventaja menor es el alcance efectivo. Todos los fusiles anti-dron desactivan drones dentro de una cierta distancia, la mayoría de las veces desde unos pocos cientos de metros hasta poco más de un kilómetro, lo que potencialmente coloca al operador dentro del alcance de un dron objetivo. Los drones equipados con tecnologías más potentes de anti-interferencias podrían seguir funcionando, y los sistemas del arma de interferencia podrían estar cambiando de frecuencia para sortear la interferencia. Conocer los puntos fuertes y débiles permite al usuario utilizar adecuadamente un arma anti-dron dentro de los límites de sus principios de funcionamiento.